El contador Ariel Roperti habría oficiado de nexo entre el exjuez y el Club. Vive en pareja con una reconocida bailarina en el exclusivo country Highland Park de Pilar. Una vida de lujos y vínculos con Independiente
El nombre de Ariel Roperti otra vez vuelve a sonar. Lo hizo hace unos años cuando comenzó a ser señalado como testaferro del exjuez Norberto Oyarbide y ahora lo hace porque habría oficiado de nexo con el Club Independiente tras las declaraciones de Javier Cantero.
Roperti es contador y si bien tenía un buen pasar económico, tuvo un cambio radical a partir de 2010 cuando conoció al entonces juez federal. Según la hipótesis de la investigación por enriquecimiento ilícito, usaba la “chapa” del magistrado para hacer negocios. Entre otras cosas, proponía soluciones “mágicas” a firmas o particulares que tenían problemas con la AFIP. Aseguran que el contador tenía buena información que le brindaba un jefe regional de la AFIP de Junín, algo que también se investiga, según anticipó este jueves el canal de noticias TN en su página web.
La vida de Roperti, sin embargo, no es de bajo perfil: sigue siendo de lujo. Vive en el Highland Park de Pilar con su pareja, la bailarina Malena Firpo, y lejos de esconderse ambos exhiben el buen pasar.
El expresidente de Independiente Javier Cantero dijo que Oyarbide intentó acercarse al club, con fines de dar un curso de oratoria para levantar el ánimo y “motivar” a los jugadores. Roperti era el nexo. Se conocieron en 2012 y según distintas fuentes consultadas por TN.com.ar, el contador quería hacer pie en el club. Así fue como habría pagado la iluminación de la cancha de entrenamiento y hasta camisetas para los jugadores. En la actualidad, Roperti integra la liga Senior del club de Avellaneda, y tal cual lo hace con sus lujos, exhibe la camiseta y foto con el equipo.
Todos hoy son investigados por enriquecimiento ilícito. En semanas, el fiscal del caso Jorge Di Lello dará un avance importante y no se descarta luego un llamado a indagatoria, tanto para Oyarbide como a Roperti y Claudio Blanco, este último pareja del exjuez.
El nexo entre Roperti y Oyarbide está probado. Fotos, viajes en común, lazos familiares -ya que el juez es padrino de una de las hijas del contador-, y la conformación de sociedades que tiene junto con Claudio Blanco. Ya el fiscal avanzó y pudo dar con la presta nombre que Roperti puso en una de la firmas, una mujer que no cuenta con capacidad económica suficiente, y está avanzando con una catarata de medidas de prueba.
Desde la fiscalía de Di Lello hay un estricto hermetismo ya que la causa está bajo secreto de sumario. Pero otra vez el nombre de Roperti y Oyarbide vuelven a ocupar los principales titulares, y en breve, tendrán problemas ante la Justicia.
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