El fiscal consideró abundantemente probado la autoría de la violación y homicidio de la menor de 11 años. Para el abogado del particular damnificado -representando al padre y a la abuela paterna de Camila- dijo que "la conducta de Varela encuadró en el agravante más severo que es el abuso sexual seguido de muerte". La defensa va por la inimputabilidad y plantea la inconsttiucionalidad de la reclusión perpetua.

A las 13.56 de este lunes, se comenzó con los alegatos en el caso del juicio oral contra José Carlos Varela imputado de la violación y homicidio de la menor Camila Borda de 11 años a la que "sometió por vía anal y vaginal y luego quitarle la vida por asfixia mecánica" como puntualizó el fiscal Sergio Terrón, quien llevó a cabo la investigación, instrucción y ahora llevó el caso a los jueces del Tribunal Oral y Criminal 1 de Junín.

Terrón habló de "desproporción de fuerza" entre Varela y la menor, destacando el relato de los policías que fueron los primeros en llegar al lugar del hecho y que hablaron de un Varela en estado de nerviosismo. Mencionó que la pequeña fue estrangulada con un cable.

Mencionó la  flagrancia porque se encontró al autor del hecho con las evidencias tan contundentes. Destacó la tarea de los efectivos policiales ya que el domingo 25 de febrero se registraron siete policías heridas "tratando de preservar los hechos. Si se hubiera incendiado la casa, hubieran desaparecidos pruebas contundentes. Tres móviles fueron incendiados y diez personas fueron aprehendidas por cometer tumultos. Muchas personas contribuyeron con su integridad física para que este hecho pueda ser esclarecido", ponderó el doctor Terrón en su alegato.

Consideró que las pruebas son contundentes y respecto a las pericias, como las aportadas por la doctora Carolina Pérez Mernes sobre la multiplicidad de golpes recibidos por la pequeña en su cuerpo y habló de "trato cruel, salvaje que Varela le aplicó previo a la accediera carnalmente por vía vaginal y por vía anal con un dedo. Esta muerte tan cruel, tan salvaje, quitándole la vida con una asfixia mecánica en falta de empatía con el género humano todo. Hay que ser muy frío y cruel para cometer un homicidio tan horrendo con una criatura tan pequeño. Todo Junín estuvo conmovido y debo decir que en treinta años de carrera no se ven tan frecuentemente hechos de esta naturaleza", especificó el fiscal.

Para Terrón, Varela pudo comprender su accionar, "con facultades mentales conservadas y una amnesia selectiva y mentirosa", expresó el fiscal mencionando que "las idas y venidas, con contradicciones, nos hablan de una persona mentirosa", remarcando que Varela no presenta trastornos de memoria y entre los estudios incluyeron una tomografía computada.

El fiscal insistió en que está debidamente probado y comprobado la autoría del imputado y destacó que para él no hay atenuantes. "Varela tuvo un juicio justo. Llegó con la asesoría letrada necesaria pero la víctima no tuvo ningún derecho ni tampoco recibió piedad. El autor de este hecho ejecutó el crimen con frialdad pocas veces visto" expresó en su alegato el doctor Terrón quien mencionó alevosía en el accionar por la falta de posibilidad de defensa de Camila.

Afirmó desconocer cómo la menor fue introducida a la quinta. "La música se colocó fuerte adrede. Luego la hizo vestir y allí la mató para evitar que la niña pudiera contar todas las aberraciones y abuso que Varela cometió sobre ella. Allí decide matarla y lo hace", especificó.

Varela trató de ocultar el delito de abuso sexual con acceso carnal, ante lo cual se solicitó que se lo considere de los delitos de violación con alevosía, homicidio in criminis causa y que se imponga la pena de reclusión perpetua.

Para el abogado del particular damnificado -representando al padre y a la abuela paterna de Camila- dijo que "la conducta de Varela encuadró en el agravante más severo que es el abuso sexual seguido de muerte".

LA DEFENSA PIDE LA INIMPUTABILIDAD Y CONSIDERA QUE ES INCONSTITUCIONAL LA RECLUSION PERPETUA

El doctor Gerardo Doyle, defensor oficial y representante de Varela, dijo en su alegato que no iba a realizar disquisiciones sobre el hecho y la autoría material de su asistido pero habló de discutir la inimputabilidad de José Carlos Varela.

Aclaró Doyle que de ser declarado inimputable la persona no recupera la libertad ni tampoco goza del derecho de salidas anticipadas y reconoció que "existe un mito porque este tipo de recursos se aplica en casos aberrantes, porque son indicios de la irraccionalidad de la persona que los comete", aclaró el abogado defensor quien basó sus alegato en dichos del doctor Gustavo Villafane quien habló de "un hecho inmotivado", es decir sin motivaciones aunque aclaró que "no quita lo aberrante del hecho y lo penoso".

Para el caso que no se considere el planteo de inimputabilidad, el doctor Doyle, dijo que la calificación abuso sexual seguido de muerte, debe aplicarse si esa muerte devino como consecuencia del abuso sexual. "La alevosía no está acreditada con suficiente certeza", expresó el defensor en su alegato.

Consideró que "la calificación más adecuada sería un concurso real entre un abuso sexual agravado y un homicidio simple. Son dos hechos graves cuya materialidad sí está probado" y dejó planteada la inconstitucionalidad del artículo 124 como también la pena perpetua por agraviar el artículo 18 de la Constitución Nacional y la Convención Americana contra los tratos crueles y degradantes.

El jueves 15 a las 12 se dará a conocer el veredicto y sentencia del caso.